Por: Michel Juraidini
Es difícil hablar de Pep Guardiola sin mencionar sus logros e inventos de científico loco que han ayudado a reinventar el fútbol moderno a mayor y menor escala; es imposible negar el legado que ha dejado. No falta el valiente que, dentro de su ingenuidad, se atreve a tacharlo como un entrenador mediocre, por no decir malo, argumentando que sus logros son gracias a la calidad de sus futbolistas y no a su visión como estratega; y sí, es cierto que ahora en el Manchester City Guardiola tiene vacías muchísimas funciones que tanto le han brindado a su forma de juego (y al fútbol europeo en general, repito, su legado es innegable) una fluidez que raramente se ha visto en el deporte, no tiene un delantero que ocupe la banda como lo hace Messi o Robben; Silva es genial, pero no tiene un Xabi Alonso que lo acompañe, o un Busquets, ya ni digo un Xavi porque nos ponemos todos a llorar. Pep, pese a que el fútbol ofensivo de posesión ha sido su mantra toda la vida, siempre ha tenido una defensa sólida. Nunca la mejor, pero sólida a final de cuentas, el juego de pie a pie con los medios es algo que Pep ha perfeccionado a traves de los años y tal vez sea uno de sus secretos para haber triunfado, pero hoy no tiene ese lujo, empezando con el portero; fichó a Bravo en verano y el chileno demostró un nivel tan bajo que Caballero, un portero nada fuera de lo normal, regresó a la titularidad. Ahora la defensa: es una groseria gastar tanto dinero por Stones, el cual difícilmente va a demostrar que vale el dinero que invirtieron en él, así como no lo ha hecho Otamendi. Esta defensa no está ni cerca de ser considerada viable para ganar una Premier escasa en calidad, mucho menos para competir en Champions. Entre tanto problema, Pep se ha visto impotente, ganando partidos sin la sobriedad que lo caracteriza, empujando hacia la victoria con garra y nada más, vease la ida de la serie vs Monaco.
Por último, considero de suma importancia recordarle al lector que hasta ayer el que se consideraba como mayor fracaso de Pep era haber perdido sus últimas semifinales de Champions con el Bayern. Exacto. Llegar a las semifinales del torneo de mayor nivel competitivo en el mundo y perderlas. Hay que pensar un poco en eso y despues hablar. Hoy a Pep lo tachan de fracasado despues de que eliminaran a su equipo en octavos de final. Y es que, a final de cuentas, entiendo como mucha gente puede despreciar el estilo de Pep y sobre todo sus formas, digo, el tipo no es el más simpatico del mundo y está levantado en un pedestal impuesto por pseudointelectuales que lo comparan con Steve Jobs porque Steve Jobs fue el genio tecnológico de nuestros tiempos, etc, etc, etc… Mi punto es que, pese a todo, Pep Guardiola es uno de los mejores entrenadores que han dedicado su carrera al fútbol profesional, el nivel de sus logros lo avalan y, sobre todo, el nivel de sus fracasos.
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