La renovación del Calcio

Por: Memo González.

Con el paso del tiempo, la liga de fútbol italiana ha sido relegada a un plato de segunda mesa entre las mejores ligas europeas, en gran parte por el exponencial crecimiento a nivel deportivo y publicitario de ligas como la Premier League inglesa o La Liga española.

Pero la Serie A no solo sufrió a causa de la calidad de las ligas antes mencionadas o de los golpes mediáticos constantes por parte de la liga francesa y particularmente del Paris $aint Germain, sino que prácticamente todos los aspectos del fútbol italiano fueron rezagándose en comparación con el resto de la élite europea.

La falta de inyección de capital para atraer (o mantener) a las más grandes figuras del fútbol internacional, la carencia de planeación de proyectos ambiciosos a nivel europeo o el hecho que prácticamente todos los equipos juegan en estadios de los que no son dueños perjudicaron fuertemente al balompié italiano, pero todo esto está por cambiar.

La reciente hegemonía de la Vecchia Signora logró dar una bofetada (por cuatro temporadas seguidas) al resto de los equipos italianos y especialmente a los grandes de Italia, que mientras la Juve se colocaba cómodamente en lo más alto, mientras que rossoneros y neroazzuros se enfrentaban a problemas económicos y una total carencia de resultados positivos, manteniéndose incluso en la periferia de las competencias europeas.

Pero parece ser que todo esto cambiará a partir de la temporada por iniciar este fin de semana, ya que la Roma, quizás el equipo que más ha representado una amenaza al Goliat de blanco y negro, ha hecho inversiones clave para crear un equipo competitivo que pueda enfrentar los retos que representan la Juventus y la Champions League (Salah, Dzeko), además de que el Inter ha sacado provecho de su nuevo y multimillonario inversionista mayoritario al traer jugadores sobresalientes de otras ligas de Europa (Kondogbia, Jovetic).

Se avecinan buenos tiempos para quienes gustamos del fútbol italiano, especialmente porque los equipos grandes parecen estarse preparando para volver a ser grandes y los no tan grandes buscar llegar a serlo.

Ahora, vayamos al Coliseo que el combate está por empezar. Fino Alla Fine.