Parece ser que el idilio entre Ronaldinho y el Fluminense ha llegado a su fin dos meses después de que se anunciara su fichaje. De acuerdo con un comunicado por parte del club, la rescisión de contrato fue de mutuo acuerdo.
El ex jugador del Barcelona jugó nueve partidos (siete de liga y dos de copa), completando apenas dos de los siete en que fue titular. Disputó 549 minutos de los 810 que estuvo disponible para jugar. No marcó ningún gol.
“Gracias a todos chicos del Fluminense. Quiero agradecer al presidente y a todo el personal, jugadores por el cuidado a mí y ami familia. Me despido de este gran club con mucho respeto y agradecido”, escribió el ex jugador del Barcelona en las redes sociales.
Ochenta días duró la última aventura de Ronaldinho, que le da la razón al Querétaro, equipo con el que estuvo antes regresar a Brasil, de rescindir su contrato por su bajo rendimiento y pobre estado físico.
Todo parece indicar que la magia de “Dinho” está desapareciendo para pasar a convertirse en leyenda, en un recuerdo del jugador que iluminaba el Camp Nou vestido de azulgrana y alegraba cualquier otro estadio liderando la “Canarinha”.
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