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Por: Eleazar Garza
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Si alguien hubiera imaginado la noche del 20 de Octubre de 1988 que los Dodgers de Los Ángeles iniciarían una sequía por treinta y dos largos años, cualquiera lo hubiera tachado de loco. Muchos fueron los años de espera para volver a levantar el famoso Commisioner’s Trophy Pero los Dodgers demostraron que con resiliencia vencer toda adversidad es posible.
Cambios drásticos en la organización, un sin fin de problemas en el equipo aunado a malas decisiones en lo administrativo y peleas entre los dueños de la organización los llevaron a declararse en bancarrota en Junio del 2011.
Se necesitaba un cambio de aire urgente, la fiel fanaticada azul pedía y se merecía algo diferente, uno de los equipos históricos de la MLB estaba contra las cuerdas y no se veía como salir del atolladero.En la vida como en el béisbol, nada es para siempre. La llegada de nuevos dueños y entre los cuales viene un tipo importante, un histórico, con actitud ganadora y al que le doy gran importancia y crédito de estos Dodgers, Earvin “Magic” Johnson.
El Ajuste
La nueva administración no solo vino a inyectar en lo económico, sino en lo mental, en lo deportivo y en algo que creo es importante en todos los aspectos de la vida cotidiana, la resiliencia. Dave Roberts llegó en el 2016 y en una temporada llena de lesiones, logran ganan la división pero son vencidos por Chicago Cubs que ese año terminan una maldición de 107 años y ganarían por fin una Serie Mundial.
Empezaba la temporada 2017 y con ella las esperanzas reales de ver a un equipo de Los Angeles campeón. Con un record histórico de 104-58, ganan por 5ta vez consecutiva la división y vencen a los Cubs para ir por una serie mundial por primera vez desde aquel lejano 1988. La historia ya la conocemos todos, problemas en la loma, peloteros que a la hora importante no aparecian y el escabroso tema del robo de señales por parte de Houston Astros, los cuales ganan la serie mundial en 7 juegos.
La fanaticada ya carburaba, se veía que había equipo y había jugadores para llevar a lo que por tanto tiempo se esperaba. En la temporada 2018 aparecen fantasmas de lesiones que terminan la temporada de Corey Seager pero también surgen peloteros importantes de la talla de Walker Buehler y Max Muncy.
Se gana la división por 6ta vez consecutiva y dejan en el campo a los cerveceros de Milwaukee para ir por 2do año consecutivo a una serie mundial. Se enfrentaron a unos poderosos Red Sox de Boston que traían dinamita pura de la mano de Mookie Betts y el equipo azul y blanco pierde por 2da vez consecutiva la serie mundial.
Los Dodgers arrancaron la temporada 2019 con dudas en su manager y en su principal estrella Clayton Kershaw. Los medios y la afición parecían haber encontrado ese alguien a quien culpar cada que algo salia mal en postemporada y asi sucedio despues de ganar por 7a vez consecutiva la división y terminar en la orilla, vencidos por los Nacionales de Washington que acabarían conquistando el título de ese año.
La Nueva Era
El 2020 aparece y con él muchas sorpresas, la muerte de Kobe Bryant, leyenda adorada en la ciudad de Los Angeles, COVID-19 y cancelación de eventos deportivos en todo el mundo.
La MLB decide cancelar los entrenamientos de primavera, posponer el inicio de temporada y ajustar la cantidad de juegos para tener una temporada. En el mes de Julio firman a la super estrella Mookie Betts por 12 años y con +el la esperanza de ganar una serie mundial también.
Temporada con record de 43-17, ganando su 8va división consecutiva y con todo y dudas en la rotación del equipo venciendo a los Bravos de Atlanta en postemporada para asi llegar a otra serie mundial, ahora contra Tampa Bay y su gran equipo de pitcheo. Kershaw dejo demonios atrás y respondió de gran manera cuando fue necesitado.
El bullpen de los Dodgers asumió responsabilidad y se fajó en la loma en toda la serie. Victor Gonzalez y Julio Urias aparecieron en el juego más importante desde aquel lejano 20 de Octubre del 88 y asi el equipo de Los Ángeles conquistÓ lo que por tantos años llevaban esperando, su séptima serie mundial.
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