Por: Alonso Montenegro
El futbol es el deporte rey en México, en realidad, el 56 por ciento de la población mexicana afirma que es su deporte favorito. Teniendo como equipo favorito y más odiado al Club América, pero ese es tema de otra ocasión. Me encanta ver el futbol, el deporte más sencillo de jugar. No existe basquetbol sin canasta, beisbol sin bats o tenis sin raquetas. Sin embargo, el futbol no requiere porterías, un par de piedras o botes pueden fungir como la meta que resguarda el portero y la pelota puede ser una lata de refresco vacía o una enorme bola de cinta canela.
Aun siendo el deporte más amado por la población mexicana, es paralelamente el deporte más criticado. Citando al trovador Lazcano Malo: “mientras haya una telenovela o un partido en la televisión, de lo que sucede no te enteras México”.
Culpar al futbol de la desinformación poblacional se me haría tan irresponsable como culpar a la televisión de la falta de valores. La ropa sucia se lava en casa, seguramente como mexicano lo has oído. La desinformación no es culpa del futbol, lo firmo lapidariamente. Si a la población no le interesa saber el millonario lavado de dinero realizado por universidades mexicanas o más noticias relevantes que no apelan a la emoción, sino a la cartera mexicana, empieza de uno mismo, que en su vida poco se ha interesado en leer.
Para los contrarios es fácil decir que al mexicano no le interesa su situación porque el futbol lo tiene cegado, el chicharito es lo único que le interesa y sus mayores reclamos son las frías y deprimentes rotaciones de Juan Carlos Osorio. Coincido, no estoy limpiando por completo al futbol, lo admito, la elección del mejor jugador del mundo es un tema más relevante que las elecciones 2018 para gran sector de la población. Pero hermano lector, se me hace egoísta y una vía de escapatoria culpar de todo al futbol, mi deporte favorito, lo que para muchos es un remedio sacrosanto y liberador, largas jornadas laborales, pero el sábado es día de relajarse. Prender la televisión y ver a Oribe Peralta dominar el frente del América realizando el trabajo sucio, ver a jugadores como Pizarro esquivar a un par de jugadores con su impecable manejo de balón u observar figuras como Keisuke Honda o el francés Gignac inundar de calidad con insuficientes adjetivos el césped mexicano.
Me permito escribirle hoy al futbol, hoy que lo extraño por la maldita fecha FIFA. Pero sobre todo lo escribo por ti que lo criticas, que solo lo ves como 22 animales tras una redonda, que piensas que es el fundamental problema de la ignorancia mexicana y sin el futbol, tendríamos un mejor país. Lamento decirte que te equivocas y seguro estoy que en tu vida has tocado un balón y atravesado un marco acompañado por el grito de gol de propios. El futbol, no tiene la culpa de nada, Maradona lo dice y te lo repito, la pelota no se mancha.
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